El 14 de octubre se celebra el Día Europeo de la Conservación-Restauración y con motivo de ello, la Asociación Profesional de Conservadores Restauradores de España (ACRE) ha coordinado diversas acciones de promoción de la profesión que pueden seguirse en: EN ESTE ENLACE
El art. 46 de la Constitución Española establece: “Los poderes públicos garantizarán la conservación y promoverán el enriquecimiento del patrimonio histórico, cultural y artístico de los pueblos de España y de los bienes que lo integran, cualquiera que sea su régimen jurídico y su titularidad. La ley penal sancionará los atentados contra este patrimonio”.
Según definición de la ECCO (Confederación Europea de Organizaciones de Conservadores/Restauradores) “el rol fundamental de la profesión de Conservación-Restauración es la preservación del Patrimonio Cultural en beneficio de las generaciones presentes y futuras. La profesión de la Conservación-Restauración contribuye a la percepción, apreciación y comprensión del Patrimonio Cultural con respecto a su contexto ambiental y su importancia y propiedades físicas.”
Pese al potencial social y económico del Patrimonio Cultural, al mandato expreso de la Carta Magna y a la incorporación de la profesión de Conservación-Restauración a los niveles más altos del Sistema Universitario Español, parece ser que los poderes públicos aún no le han dado la importancia suficiente en cuanto a regulación de la profesión, estableciendo unas competencias que incluyan la toma de decisiones a niveles de dirección, manteniéndose de momento aquellas que solo valoran las habilidades manuales propias del oficio de restaurador, siempre sujeto a la intrusión tanto en la formación como en la ejecución de los trabajos, incluso en obras públicas.
Todo ello llevó a la ACRE hace poco a la redacción del manifiesto “Por el Patrimonio, por una profesión necesaria” cuyo texto completo puede leerse en EN ESTE ENLACE
FUENTE: BIBLIOTECA HISTORICA UCM